Día Europeo de la Depresión

El primer domingo de octubre se conmemora cada año, desde el 2004, el Día Europeo de la Depresión. La Depresión es un trastorno del estado de ánimo que supone la principal causa de discapacidad a nivel mundial, contabilizándose unos 350 millones de casos en todo el mundo. 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el concepto de salud como “estado de completo bienestar físico, psicológico y social”, lo que deja entrever el importante peso que tiene la parte emocional sobre la salud de las personas. Además, en los últimos años, la sociedad parece estar tomando una mayor conciencia acerca de la importancia de la salud mental, lo cual sin duda lleva a un futuro ojalá próximo de mayores recursos y atenciones a este tipo de problemáticas.

Pero, ¿en qué consiste la Depresión? Comúnmente la relacionamos con estar triste o cabizbajo, pero va más allá, presentándose una variedad de síntomas que además no son los mismos de unas personas a otras. Todos hemos estado tristes alguna vez, la diferencia es que, en circunstancias normales, ese sentimiento desaparece con el tiempo, pero para recibir el diagnóstico de Depresión, sus síntomas han de estar presentes durante gran parte del día y durante un mínimo de días seguidos. Según la ONU, la Depresión es “una enfermedad que se caracteriza por una tristeza persistente y por la pérdida de interés en las actividades con las que normalmente se disfruta, así como por la incapacidad para llevar a cabo las actividades cotidianas, durante al menos dos semanas”. Puede ir acompañada de pérdida o aumento significativo de peso y/o del apetito, insomnio o hipersomnia, agitación o lentitud psicomotora, fatiga o pérdida de energía, sentimiento de inutilidad o culpabilidad excesiva o inapropiada, y disminución de la capacidad para concentrarse.

En la población mayor, la Depresión es un problema bastante generalizado, y ha de desecharse la idea de que es una parte normal del envejecimiento, porque no lo es. Con frecuencia no se reconoce, y por tanto no recibe el tratamiento adecuado. Las principales causas que generan una Depresión en los mayores son: el pasar a residir en un centro residencial o en otro hogar diferente al suyo, un dolor o padecimiento crónico, la soledad no deseada, el fallecimiento del cónyuge o de otras personas cercanas, y la pérdida de autonomía y por ende una mayor dependencia. En ocasiones, en los mayores nos encontramos con la llamada Pseudodemencia Depresiva, que no es en realidad una demencia, sino que se trata de un conjunto de síntomas que provocan un funcionamiento deficitario de las funciones cognitivas, y que va parejo en el 75% de los casos a una Depresión, como ya vimos en una entrada anterior del blog.

La complicación más grave de la Depresión es el suicidio. En la población mayor es más frecuente el número de hombres que se suicidan que el de mujeres, siendo considerado un factor de riesgo el hecho de ser viudo o separado. Es labor fundamental por parte de las familias estar pendientes y prestar atención a cualquier posible indicio de que algo no va bien, y en tal caso buscar la ayuda profesional necesaria para que la persona mayor reciba el tratamiento y la intervención que necesita.

Ubicación

Camino del Cortijo Nº11

Natahoyo, Gijón

Puede localizarnos en el mapa

Contacto

EmailEsta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Teléfono: 984 491 822

Móvil: 679 872 845