A medida que cumplen años, las mujeres tienen la certeza de que la menopausia va a llegar, pero no todas son conscientes de los cambios que la pérdida de la menstruación acarrea. Más allá de los conocidos calores o el aumento de peso, hay problemas y dolores en los huesos asociados a esta nueva situación ¿los conoces? Vamos a explicarlos.

Cambios físicos y emocionales en la menopausia

La menopausia es una etapa de cambios en la vida de las mujeres. Esta se produce cuando los períodos menstruales finalizan de forma permanente, cuando los ovarios dejan de producir las hormonas que regulan el ciclo menstrual, tales como estrógenos y progesterona. Puede producirse en cualquier momento entre los 40 y 59 años.

No todas las mujeres la experimentan de la misma forma, se generan una serie de cambios físicos y emocionales que repercuten en su calidad de vida.

Cambios físicos

• Aumento de peso por cambios en el metabolismo. Se reduce la quema de calorías, aumentan los niveles de colesterol malo y se altera la distribución de las grasas corporales. 

• Al disminuir los niveles de estrógeno lo hacen la formación de colágeno produciendo cambios en la piel. Aumentan las arrugas y las manchas. 

• Aumenta la caída del cabello y aparecen vellos en zonas de preeminencia masculina como las patillas, labio superior o cuello.

• Al reducirse los niveles de estrógeno y progesterona, el aparato reproductor se ve afectado. Se atrofian los tejidos de la zona, aumentando las probabilidades de producirse una inflamación que genere una posterior infección, incontinencia urinaria y sequedad vaginal.

Cambios emocionales

• Las mujeres suelen experimentar ciertos malestares como dolores de cabeza y sensación de fatiga.

• La irritabilidad y alteraciones en el estado de ánimo son más habituales.

• Mayor tendencia a estados depresivos, tristeza, apatía, dificultad de concentración, entre otros cambios.

• Es bastante común que las mujeres experimenten una súbita sensación de calor que surge del pecho, aumentando el flujo sanguíneo hacia el cuello, cara y tórax. Esto acompañado de sudoración y palpitaciones que suelen durar solo unos minutos.

Evita los dolores de articulaciones y huesos en la menopausia

Aunque como sucede en todos los trastornos del organismo, cada mujer “es un mundo” y no todas sufren los mismos problemas al llegar la menopausia, los dolores de huesos y articulaciones son uno de los problemas más habituales llegado el momento.

Es algo inevitable y asociado al cumplir años, pero siempre podemos poner en práctica consejos o recomendaciones para disfrutar de esos años con una buena calidad de vida conviviendo con la menopausia. 

• Hacer ejercicio moderado y de manera regular. Pasear de manera habitual o ir a nadar son dos de los más recomendados.

• Llevar una dieta sana, evitando alimentos que favorezcan el colesterol o la hipertensión y cuidando el aporte nutricional que se necesita. Recuerda prestar especial atención a los alimentos que contengan calcio para evitar el deterioro de los huesos.

• Moderar el consumo de sustancias nocivas, como alcohol, tabaco o café. Así se disminuyen los estimulantes externos al cuerpo favoreciendo un estilo de vida saludable.

• Realizar controles periódicos de tensión arterial, colesterol y glucosa para poder detectar cualquier alteración.