Hacer la comida de manera diaria para una persona mayor requiere de unos conocimientos básicos sobre nutrición, para poder aportar a través de los alimentos todos esos nutrientes esenciales que son necesarios en su día a día. Ya hablamos en este blog de la importancia de elaborar un menú adecuado para las personas de más edad, y hoy queremos hacer hincapié en aquellos alimentos que deben aparecer sí o sí en cada comida.

¿Qué tipos de alimentos son los más recomendados para los mayores?

Aquí tienes una lista con ejemplos de aquellos alimentos que no deben faltar en la dieta de una persona mayor:

• Hidratos de carbono, preferentemente de pan y cereales integrales, legumbres y patatas.

• Grasas, preferentemente de origen vegetal, como por ejemplo, el aceite de oliva. También de productos lácteos, preferentemente bajos en grasa, que aportan calcio (muy necesario) y una parte de grasas. Sirvan yogures, leche y quesos bajos en grasa como ejemplo.

• Las proteínas son importantes para la conservación de la masa muscular. Una buena opción es incluirlas en un puré, albóndigas o croquetas, en caso de que la persona tenga problemas al masticar. Evitar las carnes rojas e incluir siempre huevos y pescado, a poder ser azul, como la sardina, salmón, atún o el bonito, entre otros.

• Vitaminas y minerales que podemos obtener a través de frutas, verduras y hortalizas y debe haber un consumo diario.

Y no podemos olvidarnos del consumo de bebidas para mantenernos bien hidratados, sobre todo en épocas de calor, como el verano. Las recomendaciones están en 8-12 vasos de agua, aunque también se puede recurrir a infusiones y caldos.

El método del plato

Un recurso que ayuda (y mucho) a realizar las combinaciones de alimentos para las comidas principales es seguir el método del plato, creado por expertos en nutrición de la Escuela de Salud Pública de Harvard. 

Este método ayuda a saber la cantidad correcta de alimentos que hay que comer sin necesidad de pesarlos, contar calorías o raciones. Únicamente deberás conocer el espacio que debe ocupar cada grupo de alimentos en el plato de comida principal. Para ello, debes dividir (imaginariamente) el plato en cuatro partes:

• Medio plato (50 %) deberá contener hortalizas o verduras, fuente de vitaminas y minerales.

• Una cuarta parte (25 %) deberá contener los alimentos fuente de hidratos de carbono (pasta, patata, legumbres…).

• Una cuarta parte (25 %) deberá contener alimentos fuente de proteínas (pescado, huevo, carnes…).

Como ves, es una técnica realmente sencilla para saber cuánto de cada cosa se debe comer. Eso sí, no olvides completar la comida con la bebida y el postre.